¿Será el Grafeno la añorada solución al cáncer?

Desde hace mucho tiempo atrás hemos estado rodeados de un pequeño y latente material con grandes propiedades capaces de resolver problemáticas tanto a nivel tecnológico como médico. Dicho material lleva el nombre de grafeno. El grafeno es una sustancia formada por carbono puro, con átomos dispuestos en un patrón regular hexagonal similar al grafito, pero en una hoja de un átomo de espesor, además es un material biodimensional que cuenta con sólo un átomo de grosor.

Es por esto que el grafeno ha llegado a nuestros oídos como una gran promesa y es gracias a las propiedades que éste trae consigo que el grafeno será una ayuda a los tratamientos del cáncer. Este material está dotado de propiedades inéditas hasta ahora en la naturaleza, es un material destinado a hacer grandes desarrollos por los seres humanos. Una de las que más ocupan el interés de los investigadores es conseguir que los tratamientos del cáncer sean menos lesivos para los enfermos, mediante un sistema que permita eliminar células dañadas de forma selectiva. Es por esto que se hace cada vez más interesante conocer más acerca de este magnífico material y de los beneficios que podrá aportar a al mundo en avances científicos.

                                                                     

Para comenzar se hace imprescindible ahondar qué es el grafeno, pues bien, su apariencia puede parecer frágil y delicada ya que a simple vista el grafeno es como una tela transparente y flexible. Sin embargo, se trata de un material extremadamente resistente que además sirve de conductor de la electricidad. Por lo que se puede aseverar que:

 “El grafeno es una sustancia formada por carbono puro, con átomos dispuestos en un patrón regular hexagonal similar al grafito, pero en una hoja de un átomo de espesor. Es muy ligero, una lámina de 1 metro cuadrado pesa tan sólo 0,77 miligramos. Es un alótropo del carbono, un teselado hexagonal plano formado por átomos de carbono y enlaces covalentes que se generan a partir de la superposición de los híbridos sp2 de los carbonos enlazados” (http://es.wikipedia.org/wiki/Grafeno)

Gracias a su estructura previamente señalada, el grafeno cuenta con una gran variedad de propiedades capaces de propiciar una mayor evolución ante inventos científicos que ayudan a la mejora de la existencia de los seres humanos en la tierra, como por ejemplo,  una alta resistencia, ya que el grafeno es aproximadamente 200 veces más resistente que el acero, similar a la resistencia del diamante, pero es muchísimo más ligero y prácticamente trasparente, por lo que lo hace ser más flexible que la fibra de carbono. A su vez, posee la pertenencia de generar electricidad por exposición de luz solar, presentando un bajo efecto de Joule (calentamiento al conducir electrones). Finalmente, una de sus más características propiedades es que es muy denso y no deja pasar al helio en forma gaseosa, sin embargo si deja pasar al agua, la cual, encerrada en un recipiente de grafeno, muestra una velocidad de evaporación similar a la que muestra en un recipiente abierto.

De modo que gracias a estas facultades que el “material del futuro” posee lo hacen un material idóneo para múltiples aplicaciones en el área de la salud, ya que con éste se pretende efectuar mejoras en las radiaciones para los tratamientos relacionados con el cáncer. Puesto que la relación que el grafeno posee con la medicina es que gracias al efecto antibacteriano del grafeno pueden confeccionarse vendajes antibacterianos. Por su elevada resistencia y flexibilidad se ha pensado en este material para la construcción de músculos artificiales.

En base a lo previamente expuesto, un equipo de científicos del campo de la física médica adelanta una serie de tratamientos menos dañinos para los pacientes con cáncer, mediante un sistema que permite eliminar células afectadas de forma selectiva con la ayuda del grafeno, una sustancia formada por carbono puro, con átomos dispuestos en un patrón regular hexagonal similar al grafito. El método estaría basado en inyectar al enfermo partículas del mencionado material, modificadas químicamente para que se adhieran a las células cancerígenas.

De esta manera, los expertos aprovecharían la propiedad del grafeno para absorber la luz infrarroja y, por tanto, las irradiaciones con las que se trataría el tumor actuarían directamente sobre las células dañadas, sin afectar al resto del cuerpo. “Se trata de un área de investigación todavía incipiente, pero que mejoraría la eficiencia de los tratamientos radiológicos”, aseguró Pablo Jarillo, científico del Departamento de Física del Massachussetts Institute of Technology, en Estados Unidos (http://www.telesurtv.net/articulos/2013/07/17/cientificos-trabajan-en-un-nuevo-tratamiento-para-el-cancer-9986.html).

En conclusión, el grafeno es sin duda uno de los materiales más prometedores que hoy en día el mundo de la ciencia pueda poseer, ya que este pequeño pero potente material ha demostrado ser capaz de poder cambiar y mejorar en aspectos, tanto tecnológicos, como de la medicina, para lograr un bien común en nuestra sociedad, sobre todo en los avances en relación a la mejora de los tratamientos del cáncer. Ya que si reflexionamos sobre ésta, es una enfermedad que años atrás a sido mortal para quienes la padecieron, hoy en día da esperanzas de salvación para aquellos que la poseen, y gracias a este insipiente y potente material podemos esperar que le brinde a quienes en un futuro padezcan de esta enfermedad, la tranquilidad en los tratamientos para así poder continuar con su vida de una manera más tranquila y por sobre todo duradera. Por lo que el grafeno si será la añorada solución al cáncer, ya que gracias a sus propiedades y a los avances que los científicos día a día realizan para lograr este cometido, la cura al cáncer está cada vez mas cerca de nosotros.